Carpintería de aluminio para viviendas en Madrid 2025
Guía práctica para propietarios en Madrid: cómo elegir ventanas y puertas de aluminio, qué perfiles y vidrios comprar, …
¿Notas que este 2025 tu piso se calienta antes que el café? En Alicante y la costa, el sol pega fuerte y el aire sube de precio. Una fachada ventilada de aluminio crea una cámara de 20–40 mm que hace de cojín térmico: el aire circula, se lleva el calor y dentro ganas frescor sin tirar tanto del split. En una comunidad de la Playa de San Juan, con subestructura de aluminio 6063-T6, lana mineral de 60 mm (35 kg/m³) y panel composite de núcleo B‑s1,d0, midieron 3–5 °C menos a media tarde y una bajada del consumo de climatización del 18% en julio. ¿Magia? No: ventilación por zócalo y coronación, juntas de 6–8 mm y sombras que el muro agradece. En zonas de salitre, pide lacado “seaside”/Qualimarine y tornillería A4; si no, el óxido te enseñará rápido dónde escatimaste. Además, el ruido de la avenida cae unos 3–6 dB: no es un estudio de grabación, pero se nota. Resultado práctico: menos calor dentro, equipos trabajando más relajados y paredes que dejan de “cocer” al sol. Y sí, el edificio se ve más limpio y uniforme sin parecer un decorado.
La diferencia entre “va bien” y “va perfecto” está en los remates. Si vives en El Campello o Santa Pola, el levante mete agua por donde puede: exige goterones en jambas y vierteaguas, malla antiinsectos en zócalo y coronación, y anclajes químicos bien calculados. Un ático en Cabo de las Huertas vibraba con rachas; lo resolvimos con montantes reforzados cada 60 cm y juegos de dilatación de 10–12 mm en paños grandes. ¿Aluminio o SATE? Si buscas la U más baja en invierno, el SATE gana; pero el SATE sufre golpes y no te deja registrar instalaciones. La fachada ventilada te permite ocultar tubos de a/c o cables fotovoltaicos y abrir sin destrozar nada. En primera línea, pide anodizado AA25 o lacado “seaside” y revisa juntas de 6–8 mm con sellado compatible (no todo silicona vale). Mantenimiento: agua dulce y jabón neutro cada 2–3 meses cerca del mar, y reapriete anual de fijaciones. Si oyes crujidos al atardecer, no es un fantasma: son dilataciones… y se controlan con diseño y juego de juntas.
Vamos a números. Para un edificio en Alicante: subestructura + panel básico de aluminio composite ronda 85–140 €/m²; con aislamiento (50–80 mm de lana mineral) y panel de núcleo mineral, piensa en 150–220 €/m². Plazos habituales: 3–6 semanas de fabricación y 7–12 días de montaje por 600 m² con andamio. Tramitación: la mayoría de ayuntamientos piden licencia de obra menor o declaración responsable y tasa por ocupación de vía pública; si tocas vuelo o luminarias, suma permisos extra. En 2025 siguen saliendo ayudas para rehabilitación energética según convocatoria: suelen exigir memoria técnica y justificar mejora térmica ≥30%. Pide que el técnico incluya cálculo de anclajes y ficha de reacción al fuego (A2 o B‑s1,d0) del panel; en edificios altos, promotores y aseguradoras ya lo piden sí o sí. Tip útil: solicita una muestra montada (30×30 cm) con tu color y tornillería A4; en costa, esa pequeña maqueta te ahorra disgustos. Y compara con SATE con el mismo espesor de aislamiento: verás que la ventilada gana en registro y durabilidad, el SATE en inercia pura.
Nuestro equipo de expertos está listo para ayudarte con tu proyecto de carpintería de aluminio.